sábado, 4 de junio de 2011

TORRELAVEGA: Se cumplen los pronosticos y el PRC no pacta con los socialistas

El comité local del PRC decide por unanimidad abstenerse y permitir que gobierne en minoría la lista más votada
La decisión que tomó anoche el Comité Local fue a propuesta de López Marcano y por unanimidad.


Por si alguien tenía alguna duda, es Marcano quien manda y controla en el PRC de Torrelavega y son sus decisiones las que se apoyan por unanimidad. Con estas premisas y dado el "especial cariño" que se tienen desde hace muchos años, Javier López Marcano y Blanca Rosa Gómez Morante, estaba claro que lo de pactar no iba a ser posible.


Ildefonso Calderón se convertirá en el primer alcalde del PP en Torrelavega el próximo sábado, día 11, fecha fijada para la constitución de la nueva Corporación. Las dudas se despejaron anoche, tras acordar los regionalistas en una reunión de su Comité Local que no presentarán candidato a la Alcaldía y se abstendrán en la votación, dejando gobernar a los populares en minoría. Se consuma así un cambio histórico en la segunda ciudad de Cantabria, que siempre ha sido gobernada por los socialistas, salvo en la legislatura 1999-2003, en la que un pacto entre PRC y PP le dio la Alcaldía al regionalista Javier López Marcano.

El PSOE perdió por primera vez las elecciones municipales en Torrelavega el pasado 22 de mayo, fruto, sobre todo, de la crisis -el municipio es uno de los más castigados por el desempleo en la región- y del desgaste de casi tres décadas de gestión municipal. La lista que encabezó Calderón obtuvo 10 concejales, seguida de la de los socialistas (8) y regionalistas (6), que perdieron dos y un edil, respectivamente. La Corporación la completa ACPT con un solo representante.
Conversariones

El PRC 'liberó' a sus comités locales para que pactasen en los municipios. Las conversaciones en Torrelavega las han liderado su secretario general, Javier López Marcano, y su cabeza de lista, Pedro García Carmona, buscando siempre «lo mejor para Torrelavega». 

El secretario general, que decidió el año pasado no liderar la lista de su partido en Torrelavega después de más de dos décadas, dejó clara anoche la postura de su partido: «Dejaremos gobernar al PP por un ejercicio de respeto a la voluntad ciudadana y, también, como un ejercicio de compromiso con Torrelavega, que nos va a permitir practicar una oposición seria, constructiva, exigiendo el cumplimiento de los compromisos y la presentación de iniciativas que resuelvan los problemas de la ciudad, especialmente el desempleo».

También apuntó que son «gente de diálogo», por lo que no descarta acuerdos puntuales con los populares. «Si algo caracteriza a nuestro grupo -añadió- es esa capacidad para hablar, para estar tranquilos y defender los intereses de Torrelavega. Siempre que algo sea beneficioso para la ciudad, allí estaremos, tanto en el consenso como en la exigencia. No descartamos acuerdos puntuales y lo hacemos sabedores de que algunos asuntos de trascendencia bien merecen, como muestra de respeto a nuestros conciudadanos, incluso la unanimidad». López Marcano concluyó que siempre buscarán el diálogo y el acercamiento de posturas, pero «desde esa condición de miembros de la oposición, de forma que los torrelaveguenses que nos votaron se sientan dignamente representados».

No fue posible el pacto

Desde que se celebraron los comicios, se dispararon los rumores sobre posibles acuerdos y no han cesado los contactos entre las fuerzas políticas de cara a sellar un pacto que, finalmente, no ha sido posible. Las diferencias entre unos y otros ya se pusieron de manifiesto la pasada legislatura, en la que el PSOE gobernó en minoría, con apoyos puntuales del PP, pese a tener un pacto regional con el PRC.

Tanto el futuro presidente de Cantabria, Ignacio Diego, como el propio Calderón no han dejado de pedir al resto de partidos que respeten que gobierne la lista más votada, permaneciendo «abiertos al diálogo» para tratar de sumar apoyos. Tampoco ha sido posible el acuerdo entre populares y regionalistas, cuyas relaciones también distaron de ser cordiales durante el mandato anterior, con frecuentes enfrentamientos verbales en los plenos de la Corporación.

Calderón tiene lo que quería, la Alcaldía, pero teme que su equipo de gobierno sea débil frente a una oposición «poco constructiva», pese al respaldo del Gobierno regional, ahora en manos del PP. Por eso seguirá buscando apoyos de otras fuerzas políticas, aunque sean puntuales, como los que él prestó a los socialistas durante la legislatura pasada. Son muchos los que opinan que un gobierno sin mayoría absoluta es una mala noticia para Torrelavega, que requiere, ahora más que nunca, una gestión municipal eficaz para tratar de salir de la profunda crisis que padece.

Autocrítica en el PSOE

Tras el duro varapalo en las urnas, el PSOE ha intentado, sin éxito, formar un ejecutivo «progresista». Sus conversaciones con el PRC no fructificaron y le esperan cuatro años en la oposición. Su secretario general local, Pedro Aguirre, ha achacado el mal resultado en las elecciones al efecto de la crisis, que «arrastró» al partido a nivel nacional, aunque también ha hecho autocrítica: «Hemos cometido algunos errores y debemos trabajar para corregirlos».

Ignacio Diego eligió la pasada semana a Torrelavega como su primer destino para agradecer el apoyo recibido de los vecinos en las urnas y el trabajo realizado por el partido en la ciudad, pero, sobre todo, se desplazó a la segunda ciudad de Cantabria para pedir al PSOE y al PRC que «respeten la voluntad de los ciudadanos, no frustren sus ilusiones y permitan al candidato popular ser el próximo alcalde por representar a la lista más votada».

Eso sí, el futuro presidente de Cantabria dejó claro que el PP «está abierto a cualquier fórmula que sirva para reforzar la capacidad política del futuro Gobierno local de su partido». Dicho con otras palabras, el PP quiere llegar a acuerdos con los regionalistas, aunque Diego no excluyó ningún pacto, «siempre y cuando se respete el principio de que debe gobernar la fuerza más votada».

Junto a Calderón y a la presidenta local del PP, María Luisa Peón, Diego pidió a regionalistas y socialistas que «tomen ejemplo» de la «actitud leal» adoptada por su partido la pasada legislatura. A su juicio, el comportamiento del PP como «oposición proactiva» durante toda la pasada legislatura fue «premiada» por los ciudadanos en las elecciones.


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