Las aguas socialistas siguen agitadas después de los malos resultados en las elecciones del 22-M. No es nuevo el intento de la ‘familia Blanco’ por retomar el poder en el PSC-PSOE, que dirigieron con mano de hierro entre 1976 y 2000. Pero sí lo es que tras perder las votaciones en los órganos del partido (en el ultimo Comité Regional renunciaron a que se votará la petición de un Congreso extraordinaria porque no tenían apoyos suficientes) recurran a hacer campaña en los medios de comunicación de la derecha, buscando apoyos que les faltan internamente.
En la utilización como altavoz de la prensa de derechas rivalizan los que aparecen como principales dirigente de la minoría critica: Rosa Inés García Ortíz y Francisco Fernández Mañanes. Ambos no ocultan la pretensión de sustituir a Gorostiaga al frente del partido, pero no quieren esperar al Congreso ordinario del año que viene. De hecho al menos que sepamos nosotros, Rosa Inés García apenas unas horas más tarde del cierre de la campaña electoral, mantenía encuentros con Blanca Rosa Gómez Morante en la capital del Besaya, se supone que analizando la debacle electoral y buscando alternativas.
Ninguno de los miembros del Comité Regional, máximo órgano de dirección del PSC-PSOE entre Congresos, que se celebró el pasado 3 de junio, salió de la reunión, la primera celebrada tras las elecciones autonómicas y municipales y después de que Alfredo Pérez Rubalcaba quedara como único candidato a primarias, con la seguridad de que se respetarían las decisiones adoptadas. El Comité Regional aprobó por asentimiento que no habría congreso extraordinario antes de las elecciones.
No hubo que espertar ni 24 horas para que se escuchara fuera lo que los críticos no se atrevieron a plantear dentro, con la excepción de Jaime Blanco, que instó a la actual dirección a marcharse, sin precisar el cómo ni el para que. La petición de un Congreso Extraordinario ha sido sustituida por la exigencia de dimisión de la actual Ejecutiva. Es la última aportación al ‘debate’ de los críticos que cuenta con la inestimable colaboración de medios de la derecha, como El Diario Montañés, o furibundos anti socialistas como El Mundo o Alerta.
La pugna pública entre García Ortiz y Fernández Mañanes por ver quien ocupa más espacio en los medios de comunicación con sus críticas a la actual Ejecutiva regional del PSC-PSOE, esconde en realidad una segunda batalla, no explicitada pero evidente, por ver quien de los dos dirigentes va a liderar la alternativa a Gorostiaga. En las ultimas horas, y después de comprobar que no sólo por razones estatutarias sino por voluntad propia -la actual secretaria general considera que su compromiso de primera línea termina con las elecciones generales próximas- el ‘enemigo’ señalado, además de Gorostiaga, es la vicesecretaria general y consejera de Educación en funciones, Rosa Eva Díaz Tezanos.
Los ataques del sector crítico han alcanzado punto de ebullición tras cerrarse el proceso de elección de alcaldes. Se pretende aprovechar el lógico enfado de aquejoso que han pedido la alcaldía para sumar fuerzas en contra. Pero de las intervenciones en el Comité Regional de destacados dirigentes municipales no se desprendió, en ningún caso, criticas a la dirección del partido y a la estrategia de Gobierno y a la electoral por el varapalo municipal, que se enmarcó en la corriente de un voto nacional en contra del PSOE provocada por la crisis económica.
Las reflexiones de la secretaria general de los socialistas cántabros en torno a la influencia que en los malos resultados habría tenido, además de los errores que se hubieran podido cometer y el enfado de los ciudadanos por la crisis económica, las polémicas públicas y las divisiones internas, no parece haber servido para que los críticos cambien de estrategia. Es más, arrecia la campaña de acoso, utilizando de altavoz los medios de comunicación conservadores, contra la actual dirección de los socialistas cántanos, una veces con nombre y apellidos, otras ocultando la identidad.
Pero, quizás el ataque más personal y directo, autoarrogándose una representación de la que internamente carece, lo protagonizaba estos días por García Ortiz. La ex dirigente de Santander, ex diputada y ex concejal publica un largo artículo en las páginas de opinión de El Diario Montañés, en el que descalifica a Gorostiaga y Díaz Tezanos, las pide que dimitan e implícitamente se ofrece como alternativa. Reabre así de forma pública un debate que internamente quedó cerrado en el Comité Regional.
García Ortíz ha desempeñado numerosos cargos orgánicos e institucionales en los últimos 30 años. En el 2000 aspiraba a relevar a su marido, el senador Jaime Blanco, en la secretaria general, pero la división interna, que se concretó finalmente en la presentación de cuatro candidaturas a la secretaria general, la llevó a encargar la tarea de hacer perder a Gorostiaga. Pero ésta ganó contra pronóstico el Congreso.
Cuatro años después Gorostiaga, que un año antes había firmado el pacto de Gobierno con el PRC, fue la única candidata a la reelección y obtuvo el apoyo de más del 80% de los militantes socialistas. En el 2008 Gorostiaga volvería a ganar un Congreso, esta vez por un escaso margen. Frente a ella una lista critica encabezada por Blanca Rosa Gómez Morante y que contó con el apoyo de García Ortiz.
Rosa Inés García
No hay comentarios:
Publicar un comentario