Según el periódico conservador, que viene actuando como portavoz oficioso del Gobierno, con el dinero obtenido por la venta de los solares se podría pagar nóminas o cheques libros …
¿Otro favor? ¿Otro 'pelotazo' para beneficiar a amigos o conocidos a costa del bolsillo del contribuyente? Los solares de Puertochico donde estaba previsto construir la sede principal del Gobierno de Cantabria, con un proyecto diseñado por el arquitecto Rafael Moneo, van a venderse para hacer caja y a precio de ganga. La noticia la adelantó en junio pasado este digital. Pero la confirmación, filtrada hoy a El Diario Montañés, introduce una importante novedad. El valor de marcado de los tres solares, tras la correspondiente recalificación que tiene que aprobar el Ayuntamiento de Santander, el Gobierno lo reduce a menos de la mitad. Los 25 millones de euros que el Ejecutivo de Diego piensa obtener de la venta da para cubrir con dificultades el gasto de los dos proyectos encargaos a Moneo, pero será un gran negocio para el constructor -el gobierno dice que ya tienen compradores- que adquiera los terrenos.
La historia vienen de lejos. Hace meses este digital, lanzaba una idea para que la comunidad autónoma obtuviera ingresos para hacer frente a los tiempos de 'vacas flacas': la venta de los tres solares que el Gobierno tenía en Puertochico, convertido en garajes provisionales a la espera de la construcción del edificio de Moneo. Según cálculos de mercado, el Ejecutivo podría ingresar por esa venta unos 60 millones de euros. El Gobierno de entonces, formado por socialistas y regionalismo, no tomó en consideración la propuesta. Pero el PP, según publicaba en junio pasado El Mundo Cantabria, si recogía el guante e incluyó entre sus planes inmediatos desprenderse de los solares para hacer caja.
La novedad no es, por tanto, la venta sino el precio que se pide por los solares y las justificaciones demagógigas que se dan para la operación. Según el periódico conservador, que viene actuando como portavoz oficioso del Gobierno, con el dinero obtenido por la venta de los solares se podría pagar nóminas o cheques libros … Cuando el PP privatizó la 'joya de la corona' del Ayuntamiento de Santander, el Servicio de Aguas, el único que daba beneficios, se dijo que el dinero obtenido iría destinado a reducir la deuda y a inversiones para mejorar la ciudad. Los 70 millones ingresados, aproximadamente la mitad de la deuda del consistorio santanderino, desaparecieron como por ensalmo durante la campaña electoral de 2007, en la que Íñigo de la Serna sustituyó a Gonzalo Piñeiro al frente de la alcaldía de Santander.
Para que el negocio de los solares de Puertochico salga redondo es considición imprescindible que el Ayuntamiento de Santander modifique el Plan General de Ordenación Urbana, pendiente todavía de ser aprobado. Los solares tienen calificación dotacional y deberían pasar a ser residenciales. La idea de vender patrimonio no es original del PP cántaro. Algunas comunidades gobernadas por los conservadores como Valencia o Madrid ya optaron en el pasada legislatura por poner a la venta patrimonio para paliar la reducción de ingresos. Así, por ejemplo, en Valencia se puso en venta parte del patrimonio de la Generalitat, como las sedes de Industria, Bienestar Social y Agricultura, así como un solar ubicado en la Ciudad de las Ciencias. Lo mismo hizo Ruiz Gallardón, alcalde de Madrid, que hizo caja privatizando once centros deportivos y más recientemente su participación en Mercamadrid.
El Gobierno de Cantabria es dueño de posiblemente tres de los solares más codiciados de la capital, concretamente los terrenos que donde se ubicaba la antigua Diputación- derribada en el verano de 2009- y el antiguo garaje conocido como Loriente, por el que en 1983 se pagaron 300 millones de pesetas. El otro solar, situado en la parte superior del último de los citados, fue un antiguo cuartel de la Policía, transferido a Cantabria para una biblioteca, proyecto finalmente desechado en los años ochenta. Si los tres solares se vendieran para hacer viviendas y locales comerciales, el precio de ambas parcelas, según expertos inmobiliario y a pesar de la crisis, rondaría los 50 ó 60 millones de euros.
EL MONEO
A día de hoy sobre las parcelas de Puertochico todavía sigue oficialmente proyectado construir la nueva sede del Ejecutivo que reagrupe la mayoría de los departamentos de la administración regional, repartidos por varios puntos de la ciudad. El proyecto de Moneo fue elegido en 2001 por votación popular de entre los proyectos presentados, siendo presidente de Cantabria el 'popular', José Joaquín Martínez Sieso.
El gran volumen del edificio proyectado suscitó numerosas criticas que el Gobierno de socialistas y regionalistas asumió encargando una nuevas redacción del proyecto inicial mucho más reducida. Pero desde el Ayuntamiento de Santander, con Piñeiro como alcalde, se boicoteó el proyecto por razones políticas lo que retrasó el inicio de las obras. De la Serna, más sutil, lo condicionó a la aprobación del nuevo PGOU de Santander. La crisis económica hizo que finalmente la construcción del edificio quedara en suspenso.
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